Take 5 // W35
Una pausa para desacelerar, inspirarse y reconectar.
Ra{í}z
Lo que no se ve, pero sostiene todo.
Si tienes alguna imagen cotidiana que captó tu atención, puedes compartirla a
z@quienesnormal.net
Esta edición parte de una idea central:
Las raíces tienen una doble naturaleza: dan firmeza y nutren.
Nos sujetan a un territorio, a una historia, a una versión de nosotros mismos que tal vez ya no es la actual. Nos dicen quiénes somos, pero también hasta dónde podemos llegar. Nos alientan cuando más lo necesitamos y nos dan un claro de hacia dónde va el asunto.
A veces parecen una cadena: el apellido que cargas, la ciudad que te atrapa, la expectativa ajena que se siente como deuda.
Otras veces, parecen un mapa secreto: una brújula que te recuerda hacia dónde mirar cuando el mundo se vuelve demasiado amplio o confuso.
¿Tus raíces limitan el mundo que puedes habitar, o te dan el sentido que hace que todo valga la pena?
Tal vez el truco no está en elegir, sino en reconocer que no hay altura sin profundidad. Que crecer no es escapar, sino entender de qué suelo viene tu fuerza.
1. Algo que puedas VER 👀
Observa un árbol grande.
Fíjate en cómo su tronco firme y sus hojas al viento solo existen porque, bajo tierra, hay raíces invisibles a nuestros ojos sosteniéndolo.
¿Qué raíces son las que nos sostienen en nuestro día a día? Esas que nadie nota a la distancia.
2. Algo que puedas TOCAR ✋
Toma un puñado de tierra húmeda o una maceta de tu casa.
Siente su textura: fría, densa, viva.
Ahí es donde empieza todo, aunque no lo veamos.
3. Algo que puedas ESCUCHAR 🎧
4. Algo que puedas OLER 🌿
Acércate al aroma de algo que te conecte a tu infancia: pan recién hecho, el café de la mañana, la leña quemándose. Los olores son las raíces más profundas de la memoria.
5. Algo que puedas SABOREAR ☕
Come un platillo que tenga historia en tu familia o cultura. No importa si es un taco sencillo o un mole complejo. Cada bocado es una raíz que se extiende hasta tus ancestros.
Bonus:
Escribe en una hoja el nombre de tres personas o momentos que han sido tus raíces. Luego, agradece en silencio a cada uno. Es la manera más simple de regar lo que te sostiene.
Si te gusto puedes compartir con quien gustes y si no, pues no.
hasta el siguiente viernes!
