Capital
Lo que acumulamos y lo que nos acumula.
Si tienes alguna imagen cotidiana que captó tu atención, puedes compartirla a
z@quienesnormal.net
Esta edición parte de una idea central:
¿Todo lo que llevamos acumulando a lo largo del camino termina por volverse un peso muerto? o es más bien un escalon que nos ayuda tener un vista más comoda desde arriba?
el capital puede acumularse con el tiempo; en casi todas sus formas (capital fisico, humano, intelectual, social , etc.,) pero, ¿puede el capital acumular tiempo?
Con el tiempo, todo se acumula.
El dinero en el banco, los contactos en el teléfono, los libros no leídos, las frases no dichas, las lecciones aprendidas, los errores que ya no duelen pero siguen ahí.
Todo se apila en un rincón invisible de nuestra vida.
Pero el tiempo, el verdadero capital, no admite ahorro ni intereses. No hay bóveda que pueda guardarlo, ni fórmula que lo duplique.
Podemos alquilarlo, podemos comprar la ilusión de que nos pertenece, pero no podemos acumularlo.
Y tal vez ahí está la trampa y el alivio: entender que lo único que podemos hacer es transformar el tiempo que ya tenemos en algo con sentido, que el capital que realmente importa es el significado.
Porque cuando ese significado se apila y nuestra atención se conjuga, lo que acumulamos se convierte en plataforma; lo que acumulas no te hunde, te eleva.
1. Algo que puedas VER 👀
Observa tu espacio de trabajo o tu casa:
¿cuántos objetos están ahí solo “por si acaso”?
El capital también es físico; es peso que cargamos sin darnos cuenta.
hay una movie dosmilera que aborda la cuestion tiempo dinero capital.
2. Algo que puedas TOCAR ✋
Toma una moneda, un billete, o incluso una recibo, ticket etc. Siente su textura. Piensa en cuántas manos lo han sostenido, cuántas historias de cansancio y deseo caben en ese papel o metal.
3. Algo que puedas ESCUCHAR 🎧
el capital seduce, domina y a veces, nos devora.
¿qué parte de mí también baila al ritmo del capital?
4. Algo que puedas OLER 🌿
El olor metálico de las monedas, el papel de los billetes, el café que te mantiene trabajando. Cada aroma se vuelve parte de la rutina de producir y consumir.
el perfume invisible del esfuerzo.
5. Algo que puedas SABOREAR ☕
Ese café o gustito que te compras como recompensa por trabajar duro.
El sabor del “me lo gané”, que también es parte del ciclo del capital.
Disfrútalo sin culpa, pero observa el ritual: cómo el capital se vuelve sabor, recompensa y consuelo.
Bonus:
Haz un mapa de tu semana y marca con color:
En verde, los momentos en los que el capital te dio algo (placer, seguridad, calma).
En rojo, los momentos en que te quitó algo (tiempo, energía, paz).
Al final, pregúntate: ¿quién trabaja para quién?
Si te gusto puedes compartir con quien gustes y si no, pues no.
hasta el siguiente viernes!