¿Qué tal si el ser pendejo es más
una cuestión de genes que una sucesión de malas elecciones?
No quisiera darles un apoyo a
quienes han cometido grandes errores en la historia o tomado las peores
decisiones, pero piénsenlo, podría ser una realidad.
Cuando la conquista de los
españoles y sus navíos llenos de saqueadores y maleantes, nosotros ya
existimos, ya estábamos organizados y teníamos nuestros problemas, como en toda
sociedad había diferentes roles u clases de personas. A la llegada de estos tipos
no gratos, los primeros en afrontarlos o conflictuar con ellos, fueron los
líderes ya establecidos, quienes con su inteligencia o visión probablemente se
negaron y fueron asesinados, entonces los aledaños a la escena listos o
pendejos decidieron no entrar en conflicto y hacerse pendejos.
Entonces los héroes o líderes y
derivados fueron mermando su existencia, quedando pocos y menores. Al final la
transformación estaba completa, la nueva tierra está dominada y poblada de
dejados y pendejos. Su generaciones venideras se reprodujeron
sucesivamente y esto sólo favoreció una raza con genes más que definidos, genes
reforzados de pendejos por todo el continente. Logramos organizarnos, porque
somos pendejos, pero no apáticos y elegimos nuestra democracia que creímos
pendejamente funcional, nuestros esquemas de trabajo, funciones y demás.
Gobiernos y métodos de aprendizaje para garantizarnos la escuela y la
identidad.
Por lo tanto la próxima vez que veas
a tu gobierno hablando y diciendo cosas sin sentido, no pienses en él como un
fenómeno, piénsalo como la culminación de la excelencia genética, años y
generaciones de genes mejorados, desde la invasión hasta nuestros tiempos. Años
de esfuerzo han dado frutos.
Sonríe que tenemos la nación que propiciamos.