Justo ahora podría decirles cientos de cosas que no tendrían sentido, incluso podría decirles cosas que quieren escuchar. Siempre me gusta decirles a las personas que sean felices, aunque algunas veces es más difícil que otras. También me gusta decirles a las personas que sean ellos mismos. Que hagan cualquier cosa que quieran hacer, siempre y cuando lo hagan con la pasión que los caracteriza. Luego me pregunto mi función como diseñador grafico. ¿Realmente creo que podrá valerme toda mi vida haciendo gráficos? Y llego a la conclusión de siempre: no.
No es que menosprecie mi carrera, pero mi trabajo no es hacer gráficos, no es mover unos vectores o algunas capas para producir un resultado bonito.
Mi trabajo o mi función en esta vida, es simplemente Generar ideas
Crear cosas que les ayuden a las demás personas a lidiar con todo el trasfondo que hay en sus historias. Cosas que no les alteren el pensamiento al grado de raparse y unirse a alguna secta. Sino que les causen un impacto y los consideren a la hora de vivir.
Así pues voy por la vida, no generando gráficos. Sino generando ideas (“las ideas son a prueba de balas”) y es justo lo que se necesita en este momento tan crítico para la ciudad algo que no se doblegue con la violencia.
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